Haciendo fotos por el mundo: BIRMANIA X: de Hsipaw a Inle lake: carretera prohibida y Nyaunghwe

Las opciones para ir de Hsipaw a Lago Inle son tres:
-a Lashio, en tren (4hrs y media) y allí coger el avión Lashio-Heho (50 minutos) más otros 50 min. en taxi a lago Inle.
-otra opción es el bus de Hsipaw a Nyaungshwe: 16 hrs. 15.000 kyats)
-y el taxi compartido (20.000 kyats).

Nosotras lo que 'negociamos' fue un taxi para nosotras las dos solas por 90.000 kyats (45.000 cada una, unos 32€), en 6 hrs.

Nada más bajar a recepción ya estaba el 'driver' esperándonos.
Al poco de salir y aprovechando un desfile de monjes novicios que encontramos de camino, le dije que parase un momento para pasar al asiento delantero.

Aprovechó ese instante para mirar una rueda. El caso es que yo venía escuchando un ruido y no sabía si sería algo que rozaba o una puerta mal cerrada.
Pues vuelta a un taller y después de mirar y remirar, a desmontar¡
Cómo no hablan inglés, enseguida nos percatamos que no era pinchazo.
Hablamos con el hotel, pero no tenían ningún otro disponible, que si localizaban a alguno que nos lo enviaban.
Ellos decían que solo serían 45 minutos, pero sospechamos que iban a ser más: 2 horas y media¡

No tengo ni idea de cual era la pieza porque no entiendo nada: una barra rodeada de una espiral que fue lo que se rompió y lo tuvieron que desmontar y soldar y volver a colocar.
Está claro que si la pieza tuviese que venir de Alemania, jeje... nos tendrían más tiempo esperando, pero bueno.. al final a las 11 emprendimos el viaje de nuevo.

Mucho tráfico de coches y camiones hasta que cogimos una desviación y nos preguntó si queríamos comer: eran las 12,30, la hora que suelen hacer ellos la comida, así que imaginando que igual no había muchos más sitios aceptamos dónde nos llevó (no debía de haber más sitios).
En el pueblo aquel flipaban con nosotras, en el sentido que nos miran como el que ve por primera vez a alguien de otra raza.
Estaban todas las mesas libres menos una y en un pis-pas se completaron¡¡

Allí no había menú, ni dibujos ni ná. Así que como tampoco teníamos mucha hambre, el lugar ofrecía muchas dudas de salubridad, y lo que veíamos no resultaba muy apetecible, pedimos 2 cafés y enfrente que había visto un puesto, me acerqué a comprar plátanos y cacahuetes.
Pedimos después 1 cerveza para hacer algo de gasto ya que los cafés ni los probamos, (más de media taza era una pasta de posos).

Paramos media hora más o menos.
El chófer debió de ver el percal y el probe, después de lo de la avería que no sabía cómo disculparse, nos compró 2 botes de coca-cola fresquinos y nos los dio cuando entramos al coche, aunque allí quedaron pues ya le dijimos que no somos de coca-cola.
Nos ofreció agua y tampoco.
''vaya cabronas que están'' debió de pensar.. ;)

Al principio la carretera se las traía: muy estrecha, que no se cruzan dos coches, y a tramos en obras.

Saqué el mapa para preguntarle cuál era el pueblo: Nauwnghkio, me señaló.
Y la ruta a seguir?... pues la amarilla, que es la más recta pero que les dijeron a unos que encontramos que para ir por ella, era necesario pedir permiso pues entra en esas carreteras y pueblos que no están permitidos a los extranjeros.
Se supone que por los militares o por si hay alguna confrontación en esas zonas.

De hecho, ellos dijeron que les había hecho el gesto de apuntar la sien, .. para explicar la prohibición.
Bueno,... pues a ver si tenemos suerte¡,..( pensamos...)

Pero lo que más impone eran los puertos y montañas que pasamos y el estado en que está y no solo por las obras.

Las tiendas dónde viven los que trabajan en la carretera, principalmente mujeres, en las que permanecen durante meses.

Al bajar uno de los puertos, aparcó un poco al lado de una caseta que había al lado de la carretera.

Le vimos hablar con uno que estaba dentro y yo que iba con ganas de aseo, pensé en la posibilidad de ello y me bajé del coche.
Al verme, el que estaba en la caseta, salió de ella y ya vi que llevaba un uniforme.

Me hice la tonta y le pregunté por la toilette. Ni él me debió entender, ni yo le entendí lo que contestó, pero me señaló lo que ponía en el bolsillo... mas o menos ''Policía Militar''.
Al regresar el conductor le pregunté lo mismo y habló con el P.M. Me indicaron seguir un caminito y que al fondo a la derecha.... ;) tela¡¡

menuda corripa¡¡ (mejor ni lo describo ;) )

Cuando volví, estaban departiendo dos polis; y el coche echando humo a cuenta del agua que le echaba con el cazo que le prestaron.

Y Ana, que sale preguntándome por la toilette, mientras éstos me miraban con unas caras muy serias.
Le indico por dónde y al dar la vuelta, allí seguían con la misma cara. Me pareció que tenía que alegrar un poco el ambiente y me puse a decirles lo de la carretera y lo bonito que eran aquellas montañas.

Lo de 'very beautiful' lo debieron de pillar, porque se les abrió una sonrisa y a partir de ahí, ya se rompió el hielo y empezaron a preguntarme por el país y alguna cosa más, pero en su idioma que no entendí.

Esperamos a que dejara de echar humo la rueda y reiniciamos el viaje.
Me atreví a hacer unas fotos con el móvil al conductor echando agua a la rueda, pero ni se me ocurrió apuntar más alto, no fuera a ser... ;)

Después volvieron a sucederse precipicios, curvas imposibles y descensos y subidas interminables, hasta que ya mejoró un poco la carretera y volvimos a encontrar alguna aldea y gente por los campos.

Vehículos en ese trayecto ni uno solo, ni taxis y mucho menos autobuses. Solo algunos camiones con material para las obras, supongo.

y fue terminar con las carreteras imposibles, cuándo empezaron las primeras gotas, así hasta lo que suele ser en Asia, cuándo le da por descargar, que parece el diluvio universal.

Ellos están tan acostumbrados, que cuándo nos veían asombrarnos, pensando que iba a ser imposible salir de allí, se parten de risa.

Después de tanto ajetreo, bien merecía la pena, tomarse un té en la azotea del hotel y un poco de relax.

Después de mucho mirar, decidimos alojarnos en Nyaung Shwe (Inlay), emplazada al norte del lago, que es el lugar que recomiendan la mayoría, por estar más cerca de todo: los bancos, agencias de viajes dónde contratar las excursiones, diversidad de restaurantes, .... y el que concentra más numero de hoteles.

Es la ciudad más importante y con mayores infraestructuras turísticas.
Nyaungshwe, se encuentra comunicada con el lago gracias a un canal de aprox. 4 km., lo que aleja a la considerada como Reserva Natural de cualquier alboroto y estropicio urbano.

Y al día siguiente de llegar, lo dedicamos a recorrer el pueblo, el mercado y gestionar las visitas del lago y la partida del día que marchemos.

También queríamos tener un primer contacto con el lago esa tarde para ver la puesta de sol.

Nada más salir del hotel, empezamos a recibir proposiciones para la excursión del lago.
Nos pedía 3.000 kyats para ésta tarde y 20.000 mañana el día completo.

La cantidad de opciones para ver y hacer en el lago Inle, nos puede llevar a a estar varios días sin parar. Lo mejor es dejarse llevar y sin prisas ir programando la estancia que, debería de ser un mínimo de 3 días, para el lago y alrededores.
Lo de moverse por el lago es fácil porque se puede gestionar a través de una agencia, en el hotel o en la misma calle dónde la gente se ofrece por una ruta de todo el día entre los 15.000-20.000 kyats (10-15€), en función de las distancias a realizar.

Nosotras elegimos el hotel Baobabed Hostel, que nos recomendaron los madrileños con los que coincidimos en Psipaw, y que tiene diferentes tipos de habitación y precio.
Muy bien situado, a unos 10 min. del embarcadero.
Además nos hicieron sentir como en casa todo el tiempo y nos ayudaron con todas las gestiones (excursiones, transportes, etc.).

Está al lado, además, del mejor restaurante, con diferencia, que encontramos casi en todo Myanmar: Live Dim Sum House (en Yone Gyi Street, que es la calle principal, que atraviesa la ciudad,) dónde preparan el mejor Dim Sum de Myanmar y muchos otros platos deliciosos de distintos países.

En la misma calle también hay otro local donde preparan pizza al horno y muy buen ambiente.

El mercado de Nyaunghwe de los mejores¡ ordenado, limpio e infinito (fotográficamente).

Nos sentamos en distintos puntos a observar a la gente y allí estuvimos al menos un par de horas.

A través de los huecos de las lonas, veíamos que el cielo se iba oscureciendo por momentos y ya con las gotas cayendo, buscamos un sitio dónde atecharnos y tomar un zumo natural, fuera ya del mercado y al momento cayó una tromba del copón¡¡
Nos fuimos a comer al Live Diem Sun, al lado del hotel y hacer un poco de tiempo hasta las 4 que quedamos con el barquero para el primer paseo en el lago Inle.
Y eso será ya para el próximo capítulo.